Por Agostina Acosta 
El mediodía de este domingo estuvo a punto de volverse trágico en Villa Mercedes, cuando un automovilista con 2,50 gramos de alcohol en sangre provocó un accidente en la esquina de Curupaytí y General Paz. El siniestro involucró a dos vehículos y, afortunadamente, las consecuencias fueron solo lesiones leves para los ocupantes.
El incidente ocurrió alrededor de las 12:30 PM, cuando un hombre de 57 años, al mando de un Toyota Corolla, circulaba por la calle Curupaytí. A una cuadra del edificio municipal y de la plaza San Martín, se cruzó con un Volkswagen Gol rojo que transportaba a una mujer de 42 años y su hija de 9 años. El Gol, que se dirigía de sur a norte, fue impactado violentamente por el Corolla, resultando en que el vehículo rojo chocara contra un semáforo cercano.
El choque fue tan severo que el Gol terminó incrustado en el semáforo, casi arrancando el aparato de su base. Las luces del semáforo quedaron titilando, y el Toyota Corolla se detuvo sobre una vereda, a pocos centímetros de una casa.
A pesar de la gravedad del accidente, los tres ocupantes fueron asistidos rápidamente por paramédicos de dos ambulancias del Servicio de Emergencias Médicas de la Provincia (Sempro) y bomberos voluntarios de El Fortín. Las lesiones de la mujer y su hija fueron clasificadas como leves, y se encuentran fuera de peligro.
El alcotest realizado al conductor del Corolla reveló una elevada tasa de alcohol en sangre, lo que agrava la situación del accidente. La policía continúa investigando el caso para determinar las responsabilidades y sanciones correspondientes.
Este incidente resalta la importancia de la responsabilidad al volante y los riesgos asociados al consumo de alcohol. Las autoridades recuerdan a los conductores que evitar el alcohol y otras sustancias es crucial para la seguridad en las vías públicas.
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