Por Agostina Acosta 
En un giro significativo en la lucha contra la violencia en el deporte, el gobierno nacional, encabezado por Javier Milei, ha decidido prohibir la entrada de Rafael Di Zeo, conocido líder de la barra brava de Boca. Juniors, a todos los eventos deportivos en el país. La medida, reflejada en la Resolución 1167/2024 firmada por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, se implementará de forma indefinida a partir de este lunes.
La resolución se publica en un contexto tenso tras un reciente cruce verbal entre la ministra y Di Zeo. En el primer artículo de la disposición, se establece la «restricción de concurrencia administrativa a todo evento deportivo en todo el territorio nacional» para Di Zeo, quien ostenta el DNI 16.101.267. Esta decisión responde a la necesidad de salvar la seguridad en los espectáculos deportivos y de enviar un mensaje claro a aquellos que promueven la violencia en el ámbito del fútbol.
La prohibición se fundamenta, en parte, en un audio que se filtró en los últimos días, donde Di Zeo critica las de seguridad implementadas en los partidos de fútbol, así como las sanciones aplicadas a otros integrantes de su barra, conocidos como La 12. . En el audio, el líder de la barra expresa su intención de «ir a la guerra» contra las regulaciones de seguridad, lo que alarmó a las autoridades y motivó la acción contundente del gobierno.
La ministra Bullrich no se quedó atrás en su respuesta. A través de su cuenta en la red social X, lanzó un fuerte mensaje a Di Zeo, advirtiendo: «Di Zeo, a mí no me amenaza nadie. Ahora no solamente tenés restricción para entrar a las canchas, sino que te hacemos una denuncia penal. por amenazas e intimidación pública». Con estas palabras, Bullrich busca desmantelar la percepción de impunidad que rodea a los líderes de las barras bravas y reafirmar el control del Estado sobre la seguridad en los eventos deportivos.
En una entrevista posterior, Bullrich amplió su crítica a las bandas narcotraficantes que, según ella, intentan dominar el territorio del fútbol. «La ley que rige es la ley de la mafia», afirmó, indicando que la lucha contra estas organizaciones se ha intensificado. «Ya no ocurre lo que ocurría antes; lo que dice Di Zeo es que él quiere ser el garante del manejo dentro de la cancha. Él quiere hacer lo mismo: ‘la cancha es mía, yo mando tres, esos son los que ordenan’ . Como dice él, ‘a dos o tres boludos los pones en esa listita y vamos a hacer la guerra'», continuó Bullrich, evidenciando la gravedad de la situación.
La decisión del gobierno no solo busca garantizar la seguridad de los espectadores en los eventos deportivos, sino que también intenta enviar un mensaje claro a otros líderes de barras bravas sobre las consecuencias de amenazar y desafiar a las autoridades. La prohibición de Di Zeo es un paso más en la lucha contra la violencia en el fútbol argentino, un fenómeno que ha cobrado demasiadas vidas y que, según las autoridades, no puede seguir siendo tolerado.
La expectativa ahora se centra en cómo esta medida afectará a las dinámicas dentro de las barras bravas y qué otras acciones tomará el gobierno para seguir fortaleciendo la seguridad en los espectáculos deportivos en el país.
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