Por Agostina Acosta 
Unas seiscientas personas disfrutaron de una degustación con 18 bodegas de toda la región. Hubo música, sándwichs de ternera y hasta una tarotista.
La tercera edición del “San Luis wine fair” fue un éxito tanto por el nivel de las bodegas que participaron como por la respuesta de la gente, que llenó el foyer del Cine Teatro San Luis y paseó con sus copas de cristal por los stands que ofrecían todas las variantes de sus bebidas.
La cultura vitivinícola tuvo una nueva demostración de popularidad en la ciudad. “Mucha gente se quedó con las ganas de venir porque se agotaron las entradas en la preventa. Esa es una demostración de lo convocante que es el vino en la provincia”, dijo Sebastián Puntella, el organizador de la feria.
Casi 20 bodegas de alta gama se instalaron en el Cine Teatro con sus mejores productos y mostraron todo el potencial de la región. La mayoría de las empresas llegaron de Mendoza, también hubo vinos de San Juan y tres productoras de San Luis dejaron en alto el nivel provincial.
“Para que una industria tenga buenos vinos hace falta desarrollo; años de encontrar la variedad y la forma del lugar. San Luis puede producir muy buenos vinos y con ello también el consumidor irá creciendo y consumiendo cada vez con mayor cultura”, dijo Agustín Palazzo, de “Anaya wines”, un proyecto que comenzó en Mendoza hace seis años.
La reunión del sábado estuvo marinada por otros placeres que extendieron la oferta. Un pequeño puesto con café recibió a algunos visitantes interesados, los sándwiches de ternera que salieron del buffet (entregados a los visitantes por el mismo precio de la entrada) provocaron una larga fila de comensales, una tarotista se convirtió en una suerte de sensación en la noche y los músicos que se instalaron en la escalera se esforzaron en vano por captar la atención del público.
Porque claramente la estrella fue el vino, como lo explicó Celeste, de la bodega Finca Ferrer, de Tupungato. “Quisimos mostrar todo lo que tenemos por eso trajimos una línea de entrada, otra de reserva, los espumosos y el freixenet”. Sobre el público que atendió la sommelier dijo que fue variado, aunque le llamó la atención la cantidad de dueños de vinotecas que se acercaron a su stand. «También pasaron muchos mendocinos», informó.
Puntella, por su parte, señaló que la intención de la feria fue “culturizar el vino”, con bodegas boutique de reconocimiento regional. “Trajimos todos vinos de alta gama e hicimos una conjunción perfecta de factores que hicieron que todo sea un éxito”.
EDR
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