Este lunes marca un punto crucial en el caso del asesinato de Zoe Pérez en La Toma, ya que finaliza el período de prisión preventiva para los acusados, Adrián “El Gringo” Rodríguez y Leandro Oses. La familia de la joven, a través de su abogado Esteban Bustos, ha solicitado una prórroga de 120 días para permitir que se recopile más evidencia en la investigación.
El juez de Garantía, Marcos Flores Leyes, será el encargado de resolver si otorga la extensión solicitada o si, por el contrario, ordena la libertad de los imputados. Bustos declaró a El Chorrillero que aún están pendientes los resultados de las pruebas de ADN en las manchas de sangre halladas en la última inspección ocular realizada en el departamento del Barrio Barracas, lugar donde ocurrió el asesinato.
Además, el abogado informó que están previstos una junta médica forense y la reconstrucción de los hechos con todas las pruebas recolectadas. “Esto último con el objeto de contar con una evaluación técnica y objetiva que contribuya a la determinación de la verdad material”, sostuvo Bustos, quien subrayó la importancia de estos elementos para consolidar la acusación.
Una vez completada esta fase, Bustos planea formalizar la acusación, solicitar la audiencia de control y posteriormente pedir la elevación de la causa a juicio.
La audiencia de este lunes se llevará a cabo a las 11, con los acusados presentes, quienes serán trasladados desde el Servicio Penitenciario hasta los tribunales y tendrán la posibilidad de declarar ante el juez. Se espera también la presencia de Nahuel Pérez, hermano de Zoe, quien podría llegar a San Luis para acompañar a su familia en este momento clave.
Visitas: 3