Por Redacción 
Autopista de las Serranías Puntanas: la tragedia ocurrió en plena noche y deja un interrogante sobre las condiciones del traslado.
Un joven de tan solo 21 años murió este jueves por la noche en un accidente fatal sobre la Autopista de las Serranías Puntanas, a la altura del kilómetro 785, en el sur de la ciudad de San Luis.
Según confirmó la policía, el hecho se registró alrededor de las 23:00 y estuvo protagonizado por dos camiones de gran porte que circulaban de este a oeste. Uno de los vehículos, un Iveco 120e15, era conducido por un hombre de 70 años, domiciliado en Juana Koslay. Este camión remolcaba otro vehículo: un Fiat 619 T1 con acoplado, conducido por el joven fallecido, oriundo de La Dormida, Mendoza.
La situación se volvió trágica cuando, por causas que aún se investigan, el camión que era remolcado perdió estabilidad y volcó violentamente sobre la banquina. El joven quedó atrapado en la cabina, sin posibilidad de escapar.
Minutos después, personal policial, efectivos de Bomberos y un equipo médico del Sempro llegaron al lugar. Fueron estos últimos quienes constataron el fallecimiento del conductor del camión Fiat.
Además del conductor del Iveco, en el vehículo viajaba un acompañante de 40 años, también oriundo de La Dormida. A ambos se les realizaron test de alcoholemia y los resultados fueron negativos (0,00 g/l), lo que descarta que el consumo de alcohol haya tenido incidencia directa en el siniestro.
El caso quedó en manos de la Fiscalía de Instrucción N° 5 de la Primera Circunscripción Judicial, que ya investiga a fondo las condiciones del hecho. No se descarta una falla mecánica en el sistema de enganche o alguna maniobra riesgosa durante el remolque.
La muerte de este joven pone nuevamente bajo la lupa el uso del sistema de remolque de grandes vehículos en rutas nacionales, especialmente durante la noche. También levanta sospechas sobre los estándares de seguridad vial y si el camión Fiat estaba en condiciones óptimas para ser trasladado de esa manera.
Mientras tanto, el dolor se instala en la comunidad de La Dormida, que despide a un joven trabajador que encontró la muerte en plena ruta puntana. La escena final fue desoladora: un camión volcado, una cabina aplastada, un cuerpo atrapado y el silencio nocturno cortado por sirenas.
Este accidente se suma a una preocupante lista de siniestros que reflejan la urgencia de reforzar controles, protocolos y políticas de prevención en transporte de carga y asistencia en ruta. Las cifras duelen, pero detrás de cada número hay un nombre, una familia, una historia.
Natalia Ciliento